Preparándonos para el pico y placa en Cumbaya

Preparándonos para el pico y placa en Cumbaya 

No acostumbro hablar de la empresa privada de nuestro país porque considero que son el motor de la economía.

Cuando tuve la oportunidad de venir a vivir en Cumbaya, hace 14 años atrás, me encontré con un lugar especial, la naturaleza se respiraba en el ambiente, el sonido de los pájaros, la pureza del aire,  eran las etiquetas de un valle bendecido por Dios, todos sabíamos que eso no podía durar para siempre, porque en nuestro país no se tiene leyes que protejan la naturaleza y si las hay nadie les hace caso.
El crecimiento de esta urbe era consciente, respetando las áreas verdes y equilibrándolos con las edificaciones de empresas pequeñas que con esfuerzo y grandes inversiones lograban hacer las instalaciones para unirse al pequeño sistema de aguas servidas que había en esa época, osea inviertían en el entorno, mejorando de alguna manera los servicios.
Desde hace algún tiempo atrás hemos sido testigos de grandes letreros con nombres muy sugestivos que nos  hacen  pensar en verdaderos Oasis, en aquarelas naturales en atractivos parques Botániqos y un sin número de nombres que atrapan nuestra imaginación.
Pero qué pasa cuando ese nombre descriptivo se convierte en una mole de concreto que alberga a una gran cantidad de familias, que seducidos por una vida en la naturaleza compran espacios pequeños con servicios limitados para el numero  de copropietarios,
una piscina para 30 departamentos, un gimnasio de 40m2 para 30 o 40 departamentos de 4 o 5 personas cada uno y qué pasa cuando la mole está diseñada para cientos de departamentos?
¿Saben ustedes cuántos autos incrementaría en ese sector y en todo el pueblo de Cumbaya? solo recuerden casa blanca o Tonsupa en feriado y tendrán una respuesta.
No se diga de los servicios básicos como el agua y la luz, sobrecargas de energía eléctrica, carencia de agua, colapso del sistema se desagües, etc
El construir viviendas para todos es una obra digna de felicitación, pero hacerlo en una quebrada y  afectando a un pueblo que no tiene la capacidad para soportarlo es muy criticable y mucho más aún cuando hay espacio suficiente a pocos kilómetros de la quebrada.
Señores constructores, de cualquier empresa que sean, PIENSEN, el exito de sus empresas es dejar un legado de cumplimiento  y de servicio a la sociedad, el dinero es lo de menos cuando se sabe hacer esas majestuosas obras que ustedes hacen,  no dañen la armonía y la poca naturaleza que nos queda en Cumbaya, construyan porque están en su derecho pero haganlo en sectores despejados y con suficiente aire para respirar, tienen toda la Ruta Viva esperando para lucir sus proyectos con nombres de la naturaleza.
Soy un admirador de este bello Pueblo de Cumbaya, tengo el gusto y la suerte de vivir aqui, bajo ningún concepto me opondría a que gente que busca esta paz y naturaleza  pueda comprar su casa o departamento aquí, pero por  favor Señores constructores sean conscientes de lo que hacen, no construyan  en lo poco que queda de áreas verdes, reubiquen su proyecto y sigan siendo una de la mejor empresa constructora del país

Un abrazo
Rodrigo Velasco Echeverría

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